Buenas tardes a todos.
Las cámaras que se ven con mayor frecuencia en las calles de las poblaciones son cámaras de vigilancia de tráfico, tipo domo (giran 360º), y/o cámaras para la lectura de matrículas.
Lo interesante es que este tipo de cámaras en muy útil para los cuerpos de seguridad pues identifican inequívocamente un vehículo unido a un emplazamiento, una fecha y una hora precisa.
Éstas cámaras, que sobre “el papel” no identifican personas pero si vehículos, no están sujetas a la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos) y aunque no es preceptivo su anuncio, es habitual que se señalice su presencia. Los Ayuntamientos pueden instalarlas con sus propios criterios sin más condicionantes.
Las cámaras de vigilancia y seguridad si están sujetas a los condicionantes fijados en la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos). La realidad es que en una calle si no hay cámaras que controlen a los vehículos no son muy eficaces y su uso en el exterior suele quedar restringido a la vigilancia de fachadas en organismos públicos o espacios restringidos como plazas (la Plaza Mayor en Madrid, por ejemplo).
Por ello, las cámaras de tráfico en casi todos los casos se usan en ciudad también para fines de seguridad. De hecho en algunas ocasiones su fin es ése exclusivamente, pero se salva el escollo adornándolas cómo cámaras de vigilancia de tráfico.
La parte más delicada está no tanto en la monitorización desde un centro de control de tráfico o policial si no en la grabación y custodia de las imágenes.
Las cámaras de la Moraleja son cámaras de control de acceso mediante lectura de matrículas y cámaras de vigilancia de tráfico que se usan para otros fines, como todos sabéis.
La información en internet es amplísima
www.agpd.es/portalwebAGPD/canaldocumentacion/publicaciones/common/pdfs/guia_videovigilancia.pdf
En SV tenemos dos o tres opciones, en mi opinión:
• Intentar que el Ayto. instale en si cámaras de seguridad. Muy difícil, pues además de la inversión es algo engorroso la consecución de los permisos y la gestión de los datos e imágenes que se generan y a la postre ineficaz sino se controlan también los vehículos.
• Intentar que el Ayto. instale cámaras de vigilancia de tráfico y/o de control de acceso mediante lectura de matrículas. En Soto de Viñuelas sólo habría que cubrir tres entradas/salidas (estrictamente con dos sería suficiente) para tener controlado el 100% de los accesos a la urbanización. No controlaríamos el acceso a cada calle, obviamente, pero si a todo el perímetro. Además, bien anunciadas supone, sin duda, una buena medida disuasoria.
• Como no creo que cometan la inversión, podríamos solicitar permiso al Ayto. para que nos permita instalar en la vía pública, como mancomunidad que somos, y a nuestro coste estas cámaras. En este caso para evitar problemas (remotos en verdad) y que fuera realmente eficaz el sistema deberíamos darles su gestión a la misma empresa de seguridad y hacer llegar los datos captados a la policía local, pues en virtud de la LOPS:
La Ley 23/1992, de 30 de julio, de Seguridad Privada, articulo 1.2 ; “únicamente pueden realizar actividades de seguridad privada y prestar servicios de esta naturaleza las empresas de seguridad y el personal de seguridad privada, que estará integrado por los vigilantes de seguridad, los jefes de seguridad y los escoltas privados que trabajen en aquéllas, los guardas particulares del campo y los detectives privados”.
En este sentido leer este artículo que lo deja muy claro:
www.elderecho.com/observatorio/comunidadespropietarios/Camaras-seguridad-comunidades_25_552125001.html
Mi empresa se dedica específicamente a estas actividades y hemos vivido todo tipo de casuísticas. Puedo comprometerme a ponerlas a precio de coste para nuestra urbanización. Tener en cuenta que también hay que instalar un pequeño centro de control (no es una gran inversión, un pc, monitor y telecomunicaciones). Pensar, además, que existen dos costes fijos mensuales pequeños pero recurrentes: la transmisión de los datos e imágenes que se generan que debería ser por 3G en nuestro caso y el consumo eléctrico.
Un saludo a todos.
Raúl García